domingo, 17 de marzo de 2013

LEER, VIVIR, LEER


Esta es la prese­­ntación de algo que tenía muchas ganas de hacer hace tiempo. Aconsejar libros de lectura a los adolescentes o preadolescente con los que trabajo. Tiene doce años y se dividen en dos grandes grupos: los que leen bastante y los que no leen nada, o lo que es lo mismo, sólo lo que les mandan leer en clase. Ya hay gente de esa edad que lee literatura llamemos seria y a los que no creo que estas entradas de la revista pueda decirles mucho, si le dicen algo, bien venidos sean. Pero hay un gran grupo que tiene multitud de huecos en su horario que podría dedicar a algo tan placentero como es dejarse llevar por la lectura para conocer mundos diferentes: lejanos o cercanos; internos o externos. U olvidarse y se arrastrados por las palabras hasta que el duro mundo exterior no nos moleste. La verdad es que hay muchas posibilidades en un libro, por eso me niego a que os las perdáis. Así que trataré de presentaros algunos libros que creo que os podrían interesar. Vamos allá

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